
PROPIEDADES NUTRICIONALES
Controlamos desde el origen, la calidad y el sabor de todo el producto Ametller Origen, siguiendo los criterios de la pirámide alimentaria y la dieta mediterránea.
Las vitaminas son imprescindibles para mantener la salud de nuestro cuerpo.
Los alimentos que llevan este sello son aquellos que en su composición contienen más de un 15% del consumo diario recomendado de 4 o más vitaminas diferentes.
Las vitaminas se encuentran en muchos alimentos. Un claro ejemplo son frutas y verduras frescas, legumbres, frutos secos, etc.
Para asegurar el consumo diario recomendado de las múltiples vitaminas existentes, se recomienda seguir una alimentación variada y equilibrada en la que se consuman frutas frescas, verduras cocinadas ligeramente y acompañadas de aceite de oliva virgen.
Los antioxidantes son moléculas capaces de ralentizar o prevenir la oxidación de nuestro cuerpo previniendo así el envejecimiento precoz de la piel y enfermedades cardiovasculares entre otros.
Los antioxidantes los encontramos en multitud de frutas y verduras como los frutos rojos o las verduras de hoja verde.
Muchos de estos antioxidantes se ven alterados con el calor y procesamiento de los alimentos, es por ello que la gran mayoría de alimentos ricos en antioxidantes se recomiendan comer crudos. Otros antioxidantes, como es el caso del licopeno presente en el tomate, aumentan sus efectos con el calor.
El ácido fólico contribuye al crecimiento de los tejidos maternos durante el embarazo y a la formación de células sanguíneas. Es por ello que su consumo es especialmente imprescindible para las mujeres embarazadas y niños/as en edad de crecimiento.
Presente en la mayoría de vegetales de hoja verde como las espinacas o las acelgas y a las inflorescencias como las coles de Bruselas o el bróquil.
Para mantener este nutriente, se recomienda comer crudos o cocinados al vapor, plancha, microondas, etc. y durante el menor tiempo posible.
El potasio contribuye al funcionamiento normal de los músculos y del sistema nervioso. Además, contribuye al mantenimiento de la tensión arterial normal.
En los plátanos, boniatos, chirivía, espinacas, salmón, etc.
Las personas que a menudo tienen calambres musculares deberían aumentar el consumo de alimentos que contienen potasio.
Puede aumentar el consumo de potasio en su alimentación escogiendo aquellos alimentos que contienen el sello “Fuente de potasio”.
Contribuyen a mantener niveles normales de colesterol sanguíneo y, por tanto, a mantener la salud de nuestro corazón.
Permite la asimilación de vitaminas imprescindibles para nuestro cuerpo.
Contribuyen al rendimiento intelectual normal.
Aceite de oliva virgen, semillas, frutos secos, pescado azul y marisco.
No debe abusarse de su consumo.
Las grasas saludables dejan de serlo cuando aplicamos altas temperaturas. Es por ello que las frituras no son consideradas grasas saludables.
Por su contenido en potasio, contribuyen a mantener el equilibrio dentro y fuera de las células ayudando a evitar inflamaciones y estimulando la diuresis de nuestro cuerpo.
A la mayoría de verduras de hoja verde, frutas como la piña, los cítricos, el ajo o el jengibre entre otros.
Para beneficiarnos del efecto diurético y depurativo de estos productos, se debe reducir el consumo de sal (máximo 5 g/día).
Minerales como el calcio, hierro y fósforo resultan imprescindibles para el mantenimiento de los huesos y dientes. Otros como el cobre contribuyen en el funcionamiento normal del sistema nervioso
Tan sólo en los alimentos que tengan más de un 15% en 3 o más minerales imprescindibles, como los frutos secos o las legumbres.
Para garantizar las cantidades diarias recomendadas de minerales, se recomienda seguir una dieta equilibrada y variada donde las frutas y verduras frescas, legumbres y frutos secos sean los protagonistas.
La deficiencia y el exceso de minerales puede provocar enfermedades graves como la anemia o el escorbuto. Es por ello que se recomienda seguir una alimentación variada y equilibrada.
Mantener en buena forma las paredes celulares de nuestras venas y arterias, unos niveles correctos de hierro en sangre y unos niveles adecuados de colesterol sanguíneo pueden garantizar una buena salud de nuestro sistema circulatorio.
Nutrientes como la fibra, las grasas mono y poliinsaturados, o el resveratrol contribuyen a mantener en buen estado la salud cardiovascular y el funcionamiento de nuestro corazón.
Frutos secos como las nueces, semillas como el lino, aceite de oliva virgen, pescado azul, cereales integrales, uva, frutos rojos como las fresas, etc.
Escoge pan integral y con semillas para acompañar tus menús, utiliza aceite de oliva virgen crudo (sin calentar) en tus platos, añade frutos secos y frutos rojos como las frambuesas a tus ensaladas.
Para mantener la salud de nuestro corazón, es imprescindible realizar ejercicio físico moderado. Se recomienda realizar ejercicio físico cómo andar a paso ligero, correr o ir en bicicleta media hora al día.
Contribuye a la formación normal de los glóbulos rojos y la hemoglobina, imprescindibles para el transporte de oxígeno de nuestro cuerpo.
Ayuda a disminuir el cansancio y la fatiga.
Carne roja, col kale, nueces, pistachos, legumbres, etc.
Para mejorar la absorción del hierro proveniente de la dieta, se recomienda acompañarlo con alimentos ricos en vitamina C como el pimiento rojo, los cítricos, etc.
Mantener unos niveles correctos de colesterol es importante para regular la entrada y salida de sustancias a través de las células y transportar la grasa de nuestro cuerpo.
Un exceso de colesterol puede acumularse en las paredes de los vasos sanguíneos debilitándolos y creando enfermedades graves. Es por ello que se recomienda consumir alimentos que ayuden a regular los niveles de colesterol y evitar aquellos que lo contienen en grandes cantidades o pueden aumentar su síntesis como los embutidos.
Los alimentos que ayudan a regular el colesterol son los ricos en fibra como los cereales integrales, las frutas como los higos o las manzanas, los ricos en polifenoles como el aceite de oliva, los frutos rojos como las fresas, etc.
Alimentos ricos en grasa saturada y colesterol como los embutidos pueden estimular la síntesis y acumulación de colesterol sanguíneo, es por ello que se recomienda disminuir su consumo.
La actividad física diaria ayuda a mantener unos buenos niveles de colesterol sanguíneo.
Un superalimento es aquel que contiene nutrientes con mayor proporción que otros y que nos ayudan a mejorar nuestra salud y a prevenir enfermedades.
Calabaza, limón, manzana, jengibre, quinoa, ajo negro, nuevos, garbanzos, bróquil, piña, etc.
Para garantizar una buena aportación de nutrientes, deben consumirse superalimentos.
Se pueden encontrar en nuestras tiendas con el sello pertinente.
La carne roja contiene proteínas de gran calidad que ayudan a nuestro cuerpo a reparar y producir células y, por tanto, son importantes para el crecimiento y desarrollo.
Contiene grandes cantidades de hierro absorbible que ayuda a disminuir el cansancio y la fatiga.
Se considera carne roja cualquier animal mamífero excepto el conejo.
Se recomienda consumir como máximo 2 raciones/semana.
Debe retirarse la grasa visible de la carne a la hora de consumirla.
La carne roja al punto es la que mayor cantidad de hierro y otros nutrientes mantiene en su composición.
La carne blanca contiene proteínas de gran calidad que ayudan a nuestro cuerpo a reparar y producir células y, por tanto, son importantes para el crecimiento y desarrollo. Su contenido en hierro y grasa es inferior al de la carne roja.
Aves y conejo.
Su consumo es de 3-4 raciones a la semana.
La mejor manera de cocinar la carne blanca es al horno, microondas, sartén… Hay que evitar la carne rebozada y frita.
Nos aporta proteínas de calidad que ayudan a nuestro cuerpo a reparar y producir células y, por tanto, son importantes para el crecimiento y desarrollo. Su cantidad en grasa es inferior a la del pescado azul.
Son pescado blanco la merluza, el lenguado, lo dorada, la lubina, el besugo, etc.
Se recomienda consumir 3-4 raciones/semana
Nos aporta proteínas de calidad que ayudan a nuestro cuerpo a reparar y producir células y, por tanto, son importantes para el crecimiento y desarrollo, y es fuente de grasa saludable, beneficioso para nuestro corazón.
Son pescado azul las sardinas, el salmón, el atún, el bonito, etc.
Se recomienda consumir 3-4 raciones/semana de pescado y como mínimo una de ellas debe ser de pescado azul.
Para consumir pescado azul crudo, debe congelarse un mínimo de 8 h para evitar el crecimiento de bacterias patógenos.
Nos aporta proteínas de calidad que ayudan a nuestro cuerpo a reparar y producir células y, por tanto, son importantes para el crecimiento y desarrollo. Además el marisco es fuente de cinc, que contribuye al mantenimiento de la visión, piel y cabello.
Almeja, langosta, mejillón, ostra, pulpo, sepia, calamar y gamba.
En épocas de cambio de estación donde la pérdida de cabello aumenta considerablemente, se recomienda aumentar el consumo de cinc proveniente del marisco.